José María Simón Llácer, nace en Engue- ra el 15 de Enero de 1922; fue el mayor de cinco hermanos. Aprendió a leer en casa del tío Ramón Andani, en la Calle de San Ramón, y con D. Manuel Estevan, el Cura. Su vida se resume en su frase favo- rita: Las personas desaparecen, pero los hechos y los escritos perduraran. Fue un trabajador nato desde que ayuda a su padre, llevando el control de entradas y salidas de productos, en el bar de lo que era la Casa del Pueblo. Posteriormente como jornalero en el campo o de albañil o en la siega del arroz en Sueca.
Nuestro Término
€10,00
José María Simón Llácer, nace en Engue- ra el 15 de Enero de 1922; fue el mayor de cinco hermanos. Aprendió a leer en casa del tío Ramón Andani, en la Calle de San Ramón, y con D. Manuel Estevan, el Cura. Su vida se resume en su frase favo- rita: Las personas desaparecen, pero los hechos y los escritos perduraran. Fue un trabajador nato desde que ayuda a su padre, llevando el control de entradas y salidas de productos, en el bar de lo que era la Casa del Pueblo. Posteriormente como jornalero en el campo o de albañil o en la siega del arroz en Sueca.
10 disponibles (puede reservarse)
Valoraciones
No hay valoraciones aún.
Productos relacionados
La faceta histriónica para E.Granero es natural y espontánea en la gente de La Sierra. El volumen recoge unos sainetes que reflejan tal personalidad en cada autor actual. No están todos los que son y, la ausencia de alguno, supone un vacío difícil de llenar para los aficionados, pero éstos son una buena muestra de los caminos que siguen quienes en la actualidad se animan a escribir sainetes.
La dependencia, cuando no el sometimiento, del colono a las condiciones de vida impuestas por el Señor para su arraigo, marcaban un horizonte de subsistencia del que el poblador un pudo apartarse hasta finales del XVIII. A los emprendedores, los mejor preparados, solo les cabía la opción de emigrar lejos de un territorio hostil que disponiendo de recursos naturales para establecer industrias y crear riqueza suficiente para capitalizar el pueblo y promover el desarrollo de la Comarca, se veían coartados por la política de gestión del territorio…
PEPE CIGES nace en la Enguera de 1904. Estudia Derecho, oposita al Cuerpo Nacional de Policía y, al fin de la guerra, fue encarcelado. Parte de su reclusión la pasó en la cárcel de Enguera, de lo que deja testimonio en algunos “Romanzes” que, recogidos junto a las Pasás y otros relatos, exhiben el alma enguerina.
Parece que ha sido toda una vida para que el pequeño y pudoroso Matías encontrara un Manuel con el que contar sus recuerdos. Las historias más verdaderas no necesitan ser largas. Y la del hombre que regresa de la guerra siendo otro distinto, dura solo una frase pero resulta desoladora e inacabable.
Durante la última década el sector informático ha experimentado grandes avances en la mejora de dispositivos móviles. “mWorld” es un framework multiplataforma para diseñar aplicaciones gráficas con una única base de código para todo tipo de sistemas operativos utilizando una arquitectura basada en módulos independientes y plugins.
Los Cronistas que en sus escritos nos relatan los hechos, son paisanos de Enguera que al margen de sus ideas y profesiones, sienten la necesidad vital de contar la realidad… utilizan en sus escritos un lenguaje sencillo y directo, en ocasiones muy personal, dando forma a un estilo literario en el que abundan la presencia de vocablos y expresiones del habla local; todo ello con la exclusiva finalidad de resaltar, en la narración, los personajes y paisajes del pueblo que dieron forma a su matria.
Para escribir una historia local, sobre todo si se refiere a poblaciones de escasa significación en la crónica general, se tropieza con dificultades insuperables. La mayoría de los historiadores locales suelen cumplir su cometido extrayendo de la Historia general aquellos acontecimientos que se relacionan con el tema que desarrolla. Esto no es censurable, porque de alguna fuente se han de tomar los datos… Resulta esclarecedor que, en su momento, la obra de un escritor notable y reconocido no fuera publicada a pesar de haber sido premiada por la Real Academia de la Historia.
El autor pretende presentar el devenir común de la comunidad idiomática de La Sierra. Siendo un primer intento, el autor ha logrado un resultado muy loable. La Editorial, al publicarlo, espera que su lectura despierte el interés por el análisis de la vida en común de esta zona tan directamente marginada.
Sé el primero en valorar “Nuestro Término”